Hoy quiero compartir la reflexión que Boticaria Garcia compartió hace unos días y que tiene que ver con una tendencia al alza en el mundo de la cosmética.
Últimamente encontramos la etiqueta «natural» en muchos cosméticos y este término nos atrae, nos convence y nos sentimos mejor al elegir este tipo de productos, pero… ¿realmente este tipo de cosmética es más eficaz?
Que un producto lleve productos naturales no quiere decir que sea más efectivo
La eficacia de los cosméticos poco tiene que ver con que sus ingredientes sean naturales o no. De hecho, la rutina en la que incluyas el producto, la frecuencia de uso, la propia formulación del producto y su biodisponibilidad afectan de manera mucho más directa en su eficacia.
Cada vez hay más marcas que aprovechan mensajes publicitarios en los que se crítica a la cosmética química por no ser natural. Quiero dejar claro que «natural» no siempre es mejor. Muchos de los remedios naturales que encontramos por internet suelen tener consecuencias en la piel de las personas que lo usan.
¿Mi consejo? Desconfía por sistema de los remedios caseros que circulan por Internet
Es por eso que siempre os aconsejo que desconfiéis de los «remedios caseros» que circulan por las redes sociales y prometen resultados rápidos y duraderos. La dermocosmética, la ciencia del cuidado de la piel, es una indústria regulada y segura. Si mezclamos en casa distintos productos o ingredientes naturales, por muy naturales que estos sean, pueden dañar muy fácilmente nuestra piel y generar consecuencias adversas.
Todos los productos cosméticos que salen al mercado deben cumplir con las regulaciones de la CE Nº 1223/2009, ya estén hechos con ingredientes naturales o no. Gracias a esta regulación se asegura su seguridad y su inocuidad.
